En los conjuntos unifamiliares a veces lo único que separa los jardines en dos viviendas es una simple pieza metálica y no proporciona mucha privacidad. Para solucionar el problema de una forma rápida os proponemos colocar un seto artificial de uso inmediato y que no necesita mantenimiento. En el mercado encontraremos este tipo de seto, ignífugo, resistente a los rayos solares, de gran densidad y fácil limpieza, así como sujeciones, bridas y alambre plastificado de jardinería, que nos permitirán amarrar de forma adecuada el seto que coloquemos.
Presentamos el seto en la malla y lo vamos sujetando con el alambre propio y unas bridas de plástico a la estructura metálica, ya que nos servirá de soporte.
Repetiremos esta misma operación en la parte inferior del seto, de forma que quede bien seguro y no haya riesgo de que pueda soltarse.
Cortamos el trozo de seto que sobre y adaptamos el borde superior a la malla.
Para cubrir la totalidad de la superficie, cortaremos otra pieza a la medida que necesitemos, uniéndola bien con la que ya tenemos colocada.
Retiraremos el trozo sobrante de las bridas con la ayuda de un alicate.
Una vez formada la malla, además de ganar privacidad sin molestar a los vecinos con construcciones complicadas, habrás conseguido un seto que no necesita mantenimiento posterior.
¿Increíble verdad? Coméntanos si ya instalaste esta maravilla en casa y así poder saber todas tus experiencias y lo que más te gusta. Para que te traigamos más información de tu interés, divertirte e informarte, te invitamos a dejarnos un inbox para que de esta manera trabajemos de forma más rápida y sin ninguna complicación.
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FOTOGRAFÍAS / hogarmania