Evita las sustancias húmedas. Las ventanas tienden a empañarse porque el aire dentro de tu coche es húmedo. Cuando las temperaturas suben, el aire no puede contener la humedad y la mayoría de ella se deposita en tus ventanas. Por lo tanto no implementan ninguna nueva sustancia que humedezca. Paraguas húmedos o ropa de gimnasia sudada manténlos en el maletero. Y si hay nieve en el suelo, siéntate y quítate las botas antes de meter tus piernas al coche.
Lava tus ventanas. Limpia el lado de afuera de tus ventanas, pero también tendrás que limpiarlas por dentro con un spray y secarlas con un paño seco. La suciedad le da a la humedad las bases para que se asiente, haciendo más fácil que se empañe.
No manches el vidrio. Limpia las ventanas es el primer instinto de todos, pero lo único que se consigue es pasar la humedad de la ventana al pano limpio sin quitarla del coche. Si estás lavando el coche entero no pases un pano sobre las ventanas, simplemente pon antiocoongelante de alta graduación con el aire acondicionado alto y deja que eso trabaje.
Tiro de aire fresco. Si pones tu aire acondicionado en recirculación, solo estarás redistribuyendo la humedad en tu coche. (Y la sudoración y el aliento que tu despides crearan mas humedad.) Al permitir un nuevo y seco aire circular en tu coche estarás manteniendo efectivamente la humedad fuera de él.
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