¡Por fin es una realidad en Amsterdam! Se habilita el primer pasillo de supermercado libre completamente de plástico. La innovadora cadena Ekoplaza de Holanda realiza un único lineal en su supermercado, infectado por la epidemia de este material tóxico que existe en el mundo.
Este increíble plan de ejecución es considerado como emblemático del país con la intención de luchar contra la contaminación ambiental de manera global. La intención, además, es señalar el camino a otros personajes para que se sumen con esta maravillosa propuesta, incuso ofrecer a los clientes algo que no puedan resistir ¡una compra libre de plástico y cosas que puedan acumular en casa de manera tóxica!
“Sabemos que nuestros clientes están hartos de lidiar con productos rodeados, capa a capa, de gruesos envases plásticos”, sostiene en un comunicado el máximo responsable de Ekoplaza, Erik Does. No son muchos en su industria los que revalidarían sus palabras y, menos, su iniciativa.
Este, sin duda, es el primer paso que hará de esta superficie comercial especializada muchas más empresas simbólicas que aporten a la nueva industria comercial amigable con el medio ambiente en donde los productos orgánicos impulsen implantar el pasillo sin plásticos en todos y cada uno de los establecimientos.
En este caso son 74 las empresas con los que cuenta en Holanda a lo largo de 2018 y que ya están contagiados de esta increíble propuesta. La siguiente tienda que se abrirá será en junio en la ciudad de La Haya, en donde los clientes tendrán la oportunidad de contribuir con la reducción del uso de plástico en sus compras que hagan a diario.
“Sabemos que nuestros clientes están hartos de lidiar con productos rodeados, capa a capa, de gruesos envases plásticos”, sostiene en un comunicado el máximo responsable de Ekoplaza, Erik Does. No son muchos en su industria los que revalidarían sus palabras y, menos, su iniciativa.
Esta opción, aunque suene difícil de creer, se extiende en este supermercado a hasta 700 productos que van desde la carne a los lácteos, pasando por los cereales, el chocolate e incluso las salsas. En todos estos casos, se reemplazará el envase plástico por opciones más sostenibles, a base de nuevos biomateriales compostables, o de clásicos como el cristal, el metal o el cartón.
