Si no te gustan los suelos porcelánicos y echas de menos la calidez de los suelos de madera rústicos, este proyecto es para ti. En esta ocasión traemos la obra más sencilla y hermosa pero olvidada del mundo del bricolaje, construcción y carpintería, se trata de cómo construir un suelo de madera rústico sin necesidad de gastar mucho dinero. Aprende con nosotros siguiendo este increíble tutorial ¡Manos a la obra!
Solo necesitarás lo siguiente:
- Listones de madera
- Sierra circular con banco medidor
- Lijadora y lija
- Adhesivo
- Espaciadores
- Revestimiento de madera flexible de color adecuado
- Barniz para acabado (se recomienda poliuretano)
APRENDE CON NOSOTROS PASO A PASO
Preparción
Mide cuantas baldosas de madera precisas por metro cuadrado y prepara los listones necesarios para cubrir la habitación. Corta las secciones con una sierra de circular con medidor y utiliza siempre el mismo grosor. Después, lija todas las piezas para eliminar astillas y aristas.
Elige un adhesivo para suelos de madera sobre hormigón, déjate aconsejar por tu especialista. Realiza la mezcla según las instrucciones del fabricante y extiende con una llana entallada.
Colocación del suelo
Marcamos el centro de la habitación, para colocar en ese punto el primer adoquín. Desde el centro, iremos colocando el resto de los adoquines hasta el extremo de la habitación, donde los cortaremos y adaptaremos a las paredes. Si quieres, puedes realizar algunas pruebas sin cemento hasta que te sientas seguro de fijarlos.
Colocar adoquines es sencillo, solo déjalos caer sobre el adhesivo y siente como hacen un poco de vacío sobre la masa. No lo deslices, debes colocarlo a plomo y realizar algo de fuerza sobre él para que el adhesivo lo atrape.
Deberás dejar 1,5 centímetros de separación entre ellos para la correcta dilatación de los adoquines durante el verano. Ayúdate comprando espaciadores en tu tienda de bricolaje.
Remate
Una vez colocado todo el suelo, tapa las mentiras junto a la pared rematando el trabajo con un zócalo de madera. Rellena las betas de la madera o posibles desperfectos en los adoquines con el revestimiento de madera flexible.
Después, procederemos a barnizar todo el suelo con un sellador para suelos de madera de poliuretano. Es aconsejable comprar un barniz ignífugo para evitar accidentes. Puedes eliminar el exceso de sellador con un trapo o una almohadilla de lija de grano muy fino. ¡Y listo!