El paso del tiempo hace mella en muchas cosas que se deterioran considerablemente. Si bien es cierto que un buen mantenimiento puede mantener la suciedad y el deterioro a raya, también es cierto que nunca es tarde para recuperar algo que damos por perdido. En ocasiones anteriores hemos visto algunos trucos de limpieza para facilitarnos el trabajo en la tareas cotidianas del hogar, pero hoy hemos hecho una recopilación de trucos para limpiar aquellas cosas que nos resultan más difíciles y tediosas.
Estos trucos nos ayudan a ahorrar tiempo y trabajo para conseguir unos buenos resultados. Así podemos tener todas nuestras cosas como recién estrenadas. ¡Comenzamos!
#1 La rejilla de los fogones
Pon la rejilla dentro de una bolsa de plástico con 3 cucharadas de amoniaco y agua. Déjala en reposo durante 12 horas y luego lávala como normalmente. La grasa se habrá esfumado.
#2 Los marcos de las ventanas
Pon bicarbonato de sodio en el marco y en una botella haz una mezcla a partes iguales de vinagre y agua. Rocía la mezcla sobre el bicarbonato y frota con un cepillo viejo. Después de limpiar los restos con un trapo húmedo, tu ventana estará como nueva.
#3 El tapizado de los sillones
Haz una mezcla con 1 cucharada de bicarbonato, 1/3 vaso de vinagre, agua caliente, 1 cucharada de detergente. Esparce la mezcla por la mancha que quieras quitar. Si quieres hacer una limpieza general, utiliza bicarbonato, dejándolo reposar unas horas y luego aspirándolo.
#4 La junta de los azulejos
Si se te han ennegrecido la junta de los azulejos, límpialas con una mezcla de bicarbonato de sodio y vinagre.
#5 El fregadero
Haz una mezcla con 2 cucharadas de carbonato y 2 cucharadas de bicarbonato. Humedece en fregadero que quieres limpiar y esparce esta mezcla por la superficie. Después de 10 minutos de reposo, mezcla 50 gr. de vinagre y 50 gr. de blanqueador y aplícalo encima de la cama. Después de media hora aclara con mucha agua.
#6 El horno
Pon abundante amoniaco en un recipiente y ponlo en el horno frío. Déjalo reposar durante toda una noche, al día siguiente, ventilando bien la cocina, limpia el horno con normalidad, la suciedad se habrá desprendido y no quedará aroma del amoniaco en el horno.
#7 Superficies cromadas
Frota este tipo de superficies con papel encerador (el que se utiliza para el horno), los resultados son sorprendentes.
#8 El microondas
En un bol pon 1 taza de agua y unas cuantas cucharadas de vinagre, mételo en el microondas y hazlo funcionar hasta que la ventana se empañe. Espera 15 minutos antes de abrir la puerta y después limpia la suciedad con un trapo húmedo. La grasa se habrá desprendido.
#9 Las alfombras
Pon un papel absorbente sobre la mancha para que se quite el líquido. Después espolvorea bicarbonato de sodio y déjalo reposar durante 10 minutos antes de aspirarlo. Por último, mezcla 1 cucharada de lavavajillas con 1 cucharada de vinagre blanco y dos tazas de agua tibia. Frota la mancha con esa mezcla y déjalo secar.
#10 La plata
En un bol grande pon papel de aluminio, encima agrega agua caliente, media taza de sal y media taza de bicarbonato. Mete los elementos de plata dentro y déjalos durante 30 minutos, después sólo tendrás que frotar con un paño húmedo para hacer relucir de nuevo la plata.
#11 Las tablas de cortar
Pon sal gruesa encima de la superficie y con un estropajo frota bien. Si las tablas son blancas y quieres recuperar el color, sumérgela en blanqueador.
#12 Los asientos del coche
En un pulverizador mezcla agua y detergente para la vajilla a partes iguales. Esparce la mezcla por el tapizado del coche y después con un cepillo frota la superficie. Por último sólo necesitas pasar un trapo húmedo para limpiar los restos.