Al remodelar cada espacio de nuestra casa suele ser una alternativa algo costosa pero muy satisfactoria. Pero ¿sabías que haciendo un solo detalle en tu baño podrías convertirlo en uno de tus lugares favoritos y alucinantes? ¡Creélo! Aquí te traemos todo el proceso de esta increíble idea.
Un suelo que venía de fábrica, con un tono anaranjado que le decía muy poco para su propio estilo personal o del que símplemente se había cansado. Y es que solo precisaríamos de cemento y de algo de experiencia para poner todas los azulejos rectos. ¡Tan solo míralo!
Cuando ella se lanzó a buscar una solución que pudiese serle factible, se le ocurrió una idea mucho más barata pero también arriesgada. Iba a pintar su propio suelo al completo. Para ello se hizo con unas latas de pintura acrílica como las que se muestran en la imagen. Eligió esos colores por la idea que tenía pensada, pero bien podrían elegirse cualquiera de las tonalidades deseadas. Tan sólo es preciso no olvidar la tonalidad elegida por si tenemos que volver a repintar la zona.
Antes de empezar y, con la finalidad de no cometer fallos posteriores, procedió a limpiar bien el cuarto de baño. Varias veces barrió y fregó toda la superficie y preparó todo para que nada cayese de forma accidental sobre la superficie pintada causando un destrozo. Posteriormente comenzó a aplicar la primera capa de pintura negra sobre toda la superficie, a fin de tapar el color antiguo de los azulejos y de disimularlos.
Era preciso no dejar nada sin pintar, especialmente las juntas que hay entre las losetas, para que finalmente sólo tengamos que dibujar lo que nosotros queramos. El resultado final es el que aparece en la imagen. Hecho esto debemos esperar a que la pintura se seque y aplicar una segunda capa con el fin de rematar correctamente y homogeneizar bien todo el suelo. Posteriormente volveremos a esperar el tiempo prudencial para que se fuese secando la pintura de nuevo.
A continuación se comenzaría a dibujar la trama encima de cada azulejo. Aunque no estés suficientemente visibles en las fotos, podemos utilizar las guías de las juntas para delimitar el nuevo azulejo. Nosotros recomendamos que, si no tenemos la habilidad artística que sí tiene la autora, nos hagamos con alguna plantilla que podamos ir repitiendo loseta a loseta. Pintaremos con el color alternativo, aunque lleguemos a cometer errores en el pintado.
Una vez hayamos acabado la primera capa del color adecuado y, tras esperar el secado, procederemos a corregir los pequeños errores que encontremos en los dibujos. Esta fase es la más importante, pues a continuación realizaremos un sellado de la pintura. Nos tomaremos nuestro tiempo con el retoque y, recordamos, no debemos mezclar los colores en esta fase. Usamos un color y esperamos a que se seque para volver a alternar.
Con la finalidad de garantizar la duración del trabajo, procedemos entonces a la aplicación de varias capas de pintura protectora transparente. En el caso de la autora se utilizaron hasta 5 capas diferentes, lo que garantizaba que su trabajo no se estropearía con el desgaste natural de un suelo tan sufrido como el del cuarto de baño. Tenemos que tener en cuenta que va a estar en constante contacto con agua y suciedad. Había que esperar dos horas de secado entre capa y capa.
El resultado final es digno de admiración pero Susanna consiguió un acabado que nada tiene que envidiar al de un profesional. Lo mejor, sin duda, la sensación de autosuficiencia y el ahorro considerable. Asimismo, la reutilización de materiales que eviten una contaminación también es digna de admiración.
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